En la vida las cosas no pasan nunca por casualidad. Últimamente estoy trabajando con unos coachees que quieren descubrir cuál es su PASIÓN. Están viviendo un periodo apático, en el que se despiertan por la mañana sin chispa, sin entusiasmo, totalmente desanimados y con un bajo nivel de energía.
El trabajo que hacen no les satisface y no se sienten realizados. Sienten que están desperdiciando su tiempo haciendo algo que no les gusta y que no les permite sacar lo mejor de sí mismos.
Así que pensé contarles una historia que me contó, durante mi formación en coaching, un gran coach y mi maestro: Paco Yuste.
Este cuento cambió radicalmente mi vida, me despertó y hizo que hoy en día me esté dedicando a esta profesión.
La historia cuenta que, en la edad media, había un caballero francés, amante de los viajes y apasionado estudioso del comportamiento humano.
Un día de mayo monto su caballo y partió para el camino de Santiago.
Después de varios días de camino llegó a un pueblecito cerca de Burgos.
Allí su atención fue capturada por el trabajo de tres picapiedras que hacían aparentemente el mismo trabajo: levantar y cortar piedras.
Pero el caballero se dio cuenta en seguida que había algo diferente en el trabajo de cada uno de ellos.
Fue así, entonces, que se sintió debajo de roble poco lejano, y empezó a observarlos.
El primer picapiedra, un hombre alto y fuerte, trabajaba sin parar.
En su cara se podía notar claramente el disgusto y la molestia que sentía por el duro trabajo que llevaba a cabo. Estaba claramente enfadado y cada dos por tres se quejaba.
El segundo picapiedra levantaba y cortaba las piedras en religioso silencio. Estaba muy concentrado y parecía no darse cuenta de nada a su alrededor.
El tercero cortaba sus piedras sin parar, pero a diferencia de los otros dos, cantaba una bonita melodía con la sonrisa en la cara.
Al cabo de varias horas, como la actitud de los tres trabajadores seguía igual, el caballero decidió acercarse y hablar con ellos.
«¿Qué haces?» Le preguntó al primero
«¿No lo ves?» Contestó el primer picapiedra un poco molesto «estoy cortando y levantando estas malditas piedras todo el día. En invierno, cuando se me congelan las manos y se me cortan por el frío, y en verano cuando el sol me quema la cara. Todo el maldito día haciendo este trabajo desagradecido».
El caballero escuchó con atención y se fue a hablar con el segundo:
«¿Qué haces?» Le preguntó
Y él le contestó «corto piedras. Las corto de la forma más precisa y perfecta que hay. Se lo importante que es para los constructores tener piedras perfectamente cortadas y por eso mi trabajo es hacerlo de la mejor forma. Cada día, cada hora, cada minuto corto piedras intentando ser el mejor picapiedra del país».
El caballero tomó nota y se acercó al tercer hombre.
«¿Qué haces?» le preguntó
El hombre levantó los ojos hacia los del caballero, dejó de cantar y sonriendo contestó «la Catedral de Burgos».
Esta historia nos enseña que en la vida podemos vivir desde tres perspectivas diferentes: en el QUE, en el COMO y en el PARA QUE.
El primer picapiedra está atrapado en el QUE. Pone su atención solo EN LO QUE HACE, quedándose en un nivel superficial y viendo así solo las desventajas de su trabajo.
El segundo vive en el COMO. No se centra en lo que hace sino en COMO LO HACE.
Quiere ser el mejor, lucir entre todos los demás picapiedras.
Sólo el tercero vive el PARA QUE.
No se siente afectado por el duro labor, no le importa que se le corten las manos en invierno y que se le queme la cara en verano…simplemente hace su trabajo con PASIÓN porque sabe que está haciendo más allá de esto: la Catedral de Burgos.
No vive su trabajo como cualquier otro picapiedra, lo que él está haciendo los demás no pueden verlo.
Ha encontrado su PARA QUE, su MISIÓN PERSONAL.
Cuando encuentras a tu PARA QUE entonces el QUE y el COMO desaparecen.
¿Cómo hacer para descubrir tu PARA QUE?
Piensa en todos aquellos momentos de tu vida en los que te sentiste feliz, en armonía contigo mismo y con los demás, en los que tuviste la sensación de estar en el momento y en el sitio correcto.
Piensa en aquellos momentos en los que estabas tan a gusto que perdiste la cognición del tiempo, cuando las horas parecen minutos y los minutos horas.
El psicólogo Mihaly Csikszentmihalyi llama a estas experiencias “ESTADO DE FLUJO”, cuando nos perdemos completamente en lo que estamos haciendo, perdiendo el contacto con lo que nos rodea.
Nuestro PARA QUE es el DENOMINADOR COMÚN de estas experiencia, lo que las une y las acomuna. A mí me gusta definirlo como el PROPÓSITO escondido detrás de nuestro talento y de nuestras pasiones.
El escritor Ken Robinson define nuestro talento como NUESTRO ELEMENTO.
Cada uno de nosotros tiene un especial talento por algo, lo que pasa es que a menudo nos olvidamos de él a causa de la educación y de las expectativas de la sociedad en la que vivimos.
Descubre otra vez tus pasiones! Descubre que era lo que te hacía soñar de pequeño o simplemente lo que te ilusiona ahora.
Descubre otra vez tu talento e dale vida.
Te sentirás lleno de energía que te llevará poco a poco a descubrir TU PARA QUE.
En el fondo la pasión no es nada más que la MAGIA de nuestra vida.
Tu para que será la FÓRMULA MÁGICA para poder transformar cualquier QUE y cualquier COMO en un bonito marco de una obra de arte.
Con cariño
Federica
Leído en el momento exacto. Hoy examinaba espectaculares hojas de vida por LinkedIn … (y cómo yo no soy actualmente un «gurú» ), ;).
Me ha encantado la inclusión de la opción segunda y tercera (por contraste de la primera). Me recuerda la diferencia entre eudaimonia y hedonismo y cómo alcanzar algunas cotas de felicidad por el camino primero, (cuando la feliciad se basa en el «Ser»). Cuando vivimos hacia dentro, nos mantenemos en la eudaimonia (quizá, lo que tú dices del «para qué»). Una vez le preguntaron a una persona que hacia labores de limpieza en una edificio (es otro ejemplo) en qué consistía su actividad y ella contestó «Ayudo a tratar a enfermos con cáncer». Simplemente veía todo el proceso y su última finalidad. Ver una finalidad más alla de lo inmediato o hacerlo lo mejor que pueda también ayuda al Ser.
Siempre estamos a tiempo de descubrir nueva habildades, o retomar hobbies y convertilos en ocupación. Completar ingresos siempre vendrá bien en cualquier momento de nuestra vida laboral -y después-, por lo que conviene estar atentos a nuestros autosabotajes. Y como decía la cita ‘El mejor momento para buscar empleo es cuando tienes uno’ , vívelo, entonces, de la mejor manera posible.
Dejo un link que me ha gustado, del twitter de una psicóloga positiva, http://www.fastcompany.com/3046565/hit-the-ground-running/how-to-make-any-job-more-meaningful
Muchas gracias, Federica, por estos contenidos tan ‘uplifting’. La foto, preciosa, llena de metáforas.
Abrazos a ti y a los lectores.
Feliz día.
Juanma
Gracias Juanma!
Me ha gustado mucho el artículo del enlace que me has enviado! Nuestra vida, nuestro trabajo, nuestra forma de actuar en el día a día tiene un impacto en las personas que nos rodean. Hacernos la pregunta: lo que estoy haciendo hoy que beneficios puede tener el la vida de otra persona mañana? es como una verdadera brújula que podemos utilizar para no perdernos. Gracias como siempre por tu aportación! Un abrazo y que tengas un día estupendo!
Reblogueó esto en EL ARTE DE VIVIR Y EDUCARy comentado:
Muy interesante e instructivo!!
Gracias María Dolores!
Un abrazo!