El domingo pasado di un paseo por la feria del libro de Sevilla y mi atención fue capturada por un libro para niños: el EMOCIONARIO. Lo abrí, empecé a mirar sus páginas de colores y a leer su contenido quedándome del todo fascinada.
El EMOCIONARIO es un libro que explica a los niños el significado de las varias EMOCIONES HUMANAS: que son, como nacen, porque se generan. Es un poco como si fuera un DICCIONARIO que un niño puede consultar para entender cuál es su propio estado de ánimo y cuáles son las emociones que nacen dentro de sí mismo para poderlas reconocer y nombrarlas.
Si algún día voy a ser madre lo regalaré a mi hijo porque creo que es una herramienta muy útil para ayudar a un niño en el reto más grande que exista: lo de ENTENDERNOS Y CONOCERNOS A NOSOTROS MISMOS.
Cuando empezamos el colegio nos enseñan un montón de cosas muy útiles e interesantes, nuestra mente absorbe cantidades enormes de informaciones, nociones, elabora pensamientos….pero yo creo que se dejan fuera dos cosas fundamentales: nadie nos dice COMO ESTUDIAR y COMO ENTENDERNOS A NOSOTROS MISMOS.
Por un lado nadie nos explica cómo utilizar las inmensas potencialidades de nuestra mente de forma completa: ¿Sabías que existen técnicas de memorización y lectura rápida que te darían la posibilidad de memorizar y aprender en la mitad del tiempo? Yo las descubrí con los 30 años y me cambiaron la vida…¿Qué habría pasado si lo hubiera hecho con los 12? ¿Por qué nadie, aparte de que estudiar, no nos dice cómo hacerlo?
Por otro lado, más allá de las increíbles potencialidades de nuestra mente que se quedan dormidas la mayoría de las veces, hay algo aún más importante que nadie nos enseña: a ENTENDER LO QUE SENTIMOS.
¿No sería maravilloso si desde pequeños aprendiéramos a reconocer que tipo de emoción sentimos y que mensaje nos está entregando?
Las emociones son algo espontaneo que nace dentro de nosotros mismos y nos proporcionan un MENSAJE acerca de lo que estamos viviendo. Pero si perdemos este mensaje estas mismas emociones pueden ser manipuladas por nuestra mente creando unos sentimientos destructivos.
A menudo nos pasa de sentir las emociones pero de no entenderlas.
A veces sentimos miedo y lo que hacemos es huir lo más lejos posible del posible peligro sin pararnos a reflexionar sobre qué tipo de recurso nos haría falta para poder enfrentarnos a aquella determinada situación.
Otras veces nos sentimos tristes porque hemos perdido algo o alguien, pero no nos gusta sentirnos así y preferimos refugiarnos en cosas, personas, alcohol, comida…
Y ¿si hubiésemos aprendido a dar la bienvenida a aquella tristeza, a reconocerla, a darle un nombre y así ser más conscientes de que su presencia no es mala, al revés es saludable y es la normal reacción del ser humano delante de una perdida?
Veo crecer a mi alrededor una nueva generación de niños que a los 6-7 años ya tienen una vida llena de compromisos como nosotros adultos: el cole, los deberes, la clase de inglés, la clase de ballet, de violín….Todas actividades muy útiles y bonitas.
Pero estoy segura que si se dedicara más tiempo a enseñar a estas pequeñas personas a utilizar el tesoro que tienen dentro de sí mismos a lo mejor algún día podrían ser adultos más serenos, conscientes y capaces de gestionar sus propias emociones en vez que transformarse en sus esclavos.
Creo que solo aprendiendo a conocernos a nosotros mismos y a gestionar nuestra parte emocional podemos aprender a entender los demás, a tener una vida llena de significado y a construir así un ENTORNO MÁS ARMÓNICO.
Con cariño
Federica
Muchas gracias por el artículo. Lo busco de inmediato, me ha parecido muy interesante para mis hijos. Hoy en día, no es fácil encontrar una joya como ésta.
Namaste.
Me alegro mucho que te haya servido! Me pareció verdaderamente interesante y útil el emocionario!hasta para adultos! La misma editorial tiene más libros interesantes del mismo estilo! un abrazo y que tengas un día bonito!