¿ESTÁS OPOSITANDO? APRENDE A MEMORIZAR LEYES DE UNA FORMA FÁCIL Y DIVERTIDA

¿Estás opositando? Si la respuesta es sí, ya sabes que hay mucha información abstracta que memorizar, sobre todo cuando hablamos de leyes. Es allí cuando aparecen números relacionados con artículos del código civil o penal, fechas asociadas a reales Decretos, Órdenes, Leyes orgánica, entre otras. Además, se suele utilizar un vocabulario muy técnico que no siempre tenemos tan integrado, y que suele complicar aun más la situación.

¿Qué estrategias usas para estudiar y memorizar este tipo de información? Y aún más importante, ¿el recuerdo que creas suele ser a largo plazo o más bien lo olvidas o lo confundes a los pocos días, necesitando repasar constantemente?

Estoy aquí para decirte que hay un camino alternativo.

Existen unas técnicas específicas para que el estudio en general, y en este caso de las leyes se transforme en un proceso dinámico, más fácil, creativo y rápido, capaz de crear recuerdos más sólidos y a largo plazo. En este artículo voy a introducirte algunas de estas técnicas.

Lo primero que hay que decir es que para estudiar de una forma efectiva necesitamos apoyarnos en las tres características de la memoria.

LAS TRES CARACTERÍSTICAS DE LA MEMORIA

1. La primera es que la memoria es VISUAL.

Nuestros pensamientos se transforman en imágenes. Por ejemplo, si ahora te pido de cerrar os ojos y de pensar en tu persona preferida, es muy probable que la veas proyectada en tu mente.

Los expertos dicen que el 83% del potencial de la memoria es VISUAL. 

Esta es la razón por la que es más fácil recordar una película que un libro, ya que esta tiene imágenes. También es la razón por la que, cuando nos presentan una persona nueva, solemos recordar fácilmente su cara olvidando rápidamente su nombre, ya que este sería una información auditiva.

2. La memoria es ASOCIATIVA,

Conectamos constantemente una información con otra. Por ejemplo, ¿te ha pasado alguna vez de asociar un perfume a una determinada persona? O ¿una canción a un determinado recuerdo o experiencia? En programación Neurolingüìstica este fenómeno se llama ancla mental y es un mecanismo natural y espontáneo que todos hemos experimentado.

La propiedad asociativa es la que también nos ha permitido aprender a hablar.

El primer idioma que aprendimos es nuestro idioma materno y nadie, por lo menos en los primeros años de vida, nos explicó nada para conseguirlo, ninguna regla gramatical. Simplemente lo aprendimos asociando un sonido a una determinada imagen. Por ejemplo, nuestra madre, o persona de referencia, nos indicaba o señalaba un objeto y repetía su nombre hasta que, al cabo de un tiempo, nosotros también podíamos repetir la misma palabra, más o menos.

3. La memoria es EMOCIONAL.

Lo que me causa fuertes emociones tiene un impacto en mi memoria, es decir que ya no me olvido de ello. De hecho, la neuroeducación, la ciencia que estudia como aprende el cerebro, cada vez más pone en duda la forma tradicional de enseñanza poniendo en evidencia que el cerebro necesita emocionarse para aprender. Parafraseando a Francisco Mora, doctor en Neurociencias:

«sólo aprendemos aquello que amamos».

Y ahora voy a hacerte dos preguntas y me gustaría que contestaras con sinceridad:

  • ¿Cuándo estudias tus temas llenos de leyes, sueles utilizar apuntes, es decir palabras escritas, o imágenes?
  • ¿Estudiar y memorizar estos temas te resulta emocionante o más bien pesado y aburrido?

Si tus respuestas han sido “apuntes” y “aburrido” entonces cuando estudias solo utilizas una de las tres características de la memoria: la ASOCIATIVA, olvidándote por completo de la visual y de la emocional. Esta es la razón por la que te cuesta estudiar estos temas: no le estés sacando a tu mente todo su potencial.

Ahora probablemente te estés preguntando:

¿Es posible emocionarme a la hora de estudiar temas llenos de leyes?

La respuesta es sí y es también el secreto para que puedas crear recuerdos sólidos y a largo plazo.

Para conseguirlo utilizaremos dos pilares de las técnicas de memorización: la visualización P.A.V. y la conversión fonética de Leibniz.

LA VISUALIZACIÓN P.A.V.

Lo primero que hay que hacer es aprender a utilizar la memoria visual creando imágenes y asociándolas entre ellas creando una visualización, una verdadera película mental.

P.A.V.es el acrónimo de tres palabras que coinciden con las tres características imprescindibles que necesita tener una visualización para que puedas recordarla a lo largo del tiempo: ser Paradójica, tener Acción y ser Vívida.

Paradójica

Las escenas que visualizamos tienen que ser fuera de toda lógica, totalmente irracionales. Si imaginamos una escena lógica, habitual en nuestros días, precisamente por esto, nuestro cerebro está entrenado para olvidar los detalles irrelevantes, por lo tanto, la olvidaremos. ¿Cómo hacer entonces para que nuestras visualizaciones sean paradójicas? Por ejemplo, las escenas pueden ser: humorísticas, trágicas, sexuales, o muy emotivas. Este tipo de escenas, es cerebro las recoge mejor.

Acción

Las escenas deben contener movimiento, no ser estáticas. Se deben asemejar a una película de cine. La acción nos ayuda, además, a crear un orden en la sucesión de las imágenes.

Vívida

Hay que imaginar, simular, recrear la escena aportando el mayor número de detalles a los cinco sentidos: vista, olfato, oído, tacto, gusto. De esta manera, la visualización será cada vez más experiencial.

LA CONVERSIÓN FONÉTICA

Casi todas las técnicas de memorización se basan en esta antigua herramienta que representa hoy en día uno de sus principales pilares.

El sistema de la conversión fonética, consiste en asociar cada número de 0 a 9 con una o varias consonantes,

que se pueden agrupar según su sonido o según las similitudes que existen entre la forma en que se escribe el número y la consonante relacionada. Por ejemplo, el número 1 está asociado a las consonantes “t” y “d”, el 2 a la “n” y “ñ”, el 3 a la “m”…

De esta manera, será posible transformar los número en un conjunto de consonantes que utilizaremos para encontrar una o más palabras.

Por ejemplo, el número 12 se puede convertir fonéticamente en “T-N” que me permite encontrar la palabra TuNo.

De esta manera, cualquier número se puede transformar en una palabra y, entonces, en una imagen concreta.

Así deja de ser una información abstracta, difícil de memorizar. No puedo visualizar el número 12, pero sí que puedo ver claramente a un tuno.

A continuación, puedo crear una visualización PAV asociando la imagen que he encontrado a partir de la conversión fonética del número del artículo con las imágenes relacionadas con el contenido del artículo mismo.

Con estos simples pilares de las técnicas de memorización se pueden desarrollar muchas técnicas específicas para memorizar cualquier tipo de información de una forma del todo nueva y creativa.

Porque estudiar puede y debería ser algo estimulante.

Se suele pensar en una memoria extraordinaria como si fuera un don innato. Pero no es este el caso:

las mentes brillantes se educan y se entrenan.

Lo que pasa es que se suelen entrenar reforzando la parte racional y la lógica, que son unos recursos importantes de nuestra mente, pero no los únicos. Tenemos un potencial y poder creativo mucho más grande de lo que pensamos a priori y no solemos utilizarlo.

Cómo decía Albert Einstein, “la lógica  te llevará desde A hasta B, la imaginación te llevará a todas partes”.

Apóyate entonces en los tres pilares de la memoria para obtener grandes resultados

y utiliza tu imaginación y creatividad para estudiar emocionándote.

 

Si te ha gustado este artículo no te pierdas el taller práctico para memorizar leyes.