BUSCANDO LA ESPERANZA

ITALIANO

En la vida pasan cosas que son como preguntas. Luego pasa una hora, un día o años y la vida nos responde.” El día que leí esta frase por primera vez tuve la sensación de entender por fin el funcionamiento de la vida.

«Es cierto», pensé, recordando todas las cosas que me habían pasado hasta aquel momento y a las que, en aquel entonces, no era capaz de darle sentido. Pero con los ojos de hoy, mirando hacia atrás a esos momentos, puedo ponerlos en el lugar correcto, se va dando forma una imagen, como la de un puzzle, que sólo se puede ver cuando todas las piezas encajan entre ellas.

Así que este día encontré las respuestas a las preguntas que quedaron colgando durante tanto tiempo.

Viví 35 años con la certeza de que la vida era realmente así, que nada sucede por CASUALIDAD y que todo tiene su SENTIDO… hasta hace unas semanas.

A veces en la vida pasan cosas que son como bombas, y que cuando explotan dejan destrucción, rabia y amargura.

Son aquellas cosas que cuando te tocan a ti destruyen todas TUS CERTEZAS, TUS PILARES, TU FE.

Desde el momento en que te dan una trágica noticia, capaz de romper tu serenidad en un instante, en tu mente pasan varias cosas. Es como empezar a subir por una escalera hecha de escalones elevados y difíciles de escalar.

Subí y viví cada uno de estos pasos.

Y mientras todo esto me estaba sucediendo a mí, me acordé de las palabras de Elisabeth Kubler Ross y de su estudio sobre las cinco etapas del duelo.

La Doctora Kubler Ross, acompañó a sus pacientes moribundos durante la última etapa de su vida y, haciéndolo, se dio cuenta de que todos los pacientes y sus familiares pasaban por cinco etapas antes de procesar lo sucedido:

  1. FASE DE NEGACIÓN O RECHAZO: «¿Está usted seguro, doctor, que los análisis se hayan hecho bien?», «No puede ser, estás equivocado!», «¡No puedo creérmelo»; Esta fase se caracteriza por un mecanismo de defensa del paciente que no quiere aceptar la realidad que está viviendo.
  2. FASE DE LA IRA: después de la negación comienzan a mostrar emociones fuertes como la ira y el miedo, que explotan en todas las direcciones, invirtiendo el personal del hospital, la familia, Dios. Una pregunta típica es «¿por qué yo?». Esta fase es un momento crítico que puede ser a la vez el momento de máxima llamada de socorro, sino también el momento de la negatividad, y del cierre de la retirada en sí mismos.
  3.  FASE DE LA NEGOCIACIÓN: la persona involucrada comienza a ver lo que puede hacer y cómo puede encontrar algo de esperanza, a partir de una especie de negociación. En esta etapa, la persona recupera el control de su vida, y trata de reparar el reparable.
  4. FASE DE LA TRISTEZA Y DE LA DEPRESIÓN: el paciente comienza a tomar conciencia de las pérdidas que está sufriendo o va a ser sometido. Por lo general ocurre cuando la enfermedad progresa y aumenta el nivel de sufrimiento. Comienza a darse cuenta de que la rebelión no es posible, por lo que la negación y la ira se sustituyen por un fuerte sentido de derrota.
  5. FASE DE ACEPTACIÓN: cuando el paciente ha sido capaz de procesar lo que está sucediendo a su alrededor, llegará a una aceptación de su condición y de una conciencia de lo que va a suceder. En esta fase, el paciente tiende a estar más tranquilo y a comunicarse con la familia y con la gente que está a su lado.

Estas fases no se experimentan solo para elaborar el duelo, sino que también durante una ÉPOCA DE CAMBIO NO DESEADA, o durante una ÉPOCA DOLOROSA Y DIFICIL.

He podido experimentarlas todas durante este último mes, pasando  por el «No es posible, debe haber un error«, al «No es justo que esto me haya tocado a mí, la vida es injusta»; desde las oraciones: «Señor, si todo va a salir bien te juro que voy a ser una mejor persona y que nunca me quejaré jamás para nada», a la profunda tristeza en el darme cuenta que las oraciones son inútiles… las cosas pasan y ya está.

Fue experimentado la tristeza, aceptándola sin tratar de poner la cabeza bajo la arena, sin tratar de encontrar paliativos para no pensar, consciente de que todas las cosas pasan, que hoy estoy consiguiendo asimilar lo que ha pasado.

Estoy metabolizando un momento difícil, una prueba que la vida me ha puesto en la cara.

Y fue durante estos 5 pasos que perdí, y más tarde volví a encontrar, la fe en que todo tiene sentido y me dí cuenta de que cuando la tristeza y la rabia invaden nuestro corazón nos volvemos ciegos.

Estoy viviendo balanceándome entre la tristeza y la aceptación y he descubierto que hasta cuando todo parece perdido hay algo que tiene el poder de reavivar la llama de la esperanza en que hay respuestas para cada preguntas: EL AMOR Y EL CARIÑO DE LAS PERSONAS QUE NOS QUIEREN DE VERDAD.

Gracias a la presencia de estas personas muy especiales y gracias a su AMOR INCONDICIONAL me dí cuenta de que se puede aliviar la tristeza, de que la aceptación se puede transformar en fe y de que la vida, a pesar de todo, vale la pena.

Tal vez todo esto me sirva para aprender algo que me va a servir en un futuro; tal vez sirva para abrir nuevas puertas o quizá, quién sabe, sólo para aprender a ver las cosas de manera diferente. Para aprender a dar el justo valor a lo que vivimos, a las personas que forman parte de nuestras vidas, a dejar de amargarnos la vida por tonterías y aprender a disfrutar de cada pequeña cosa.

Con la esperanza de que pronto lleguen las respuestas y de que tú también puedas encontrar las tuyas.

Con cariño

Federica