Una de las preguntas que con más frecuencia me hacen es: «Cómo puedo prepararme una oposición si tengo poco tiempo para estudiar?»
Hay personas que trabajan y tienen niños pequeños y que realmente tienen muy poco tiempo a disposición para avanzar en su temario. Sin embargo estoy más que convencida que más vale la calidad del tiempo que su cantidad.
Hoy quiero hablarte de cómo hacer para aprovechar al máximo el poco tiempo que tenemos a disposición para estudiar o para avanzar en cualquier proyecto personal o profesional.
La fórmula del trabajo de calidad
Cal Newport en su libro Deep Work comparte una formulita que muy bien nos desvela cuál es el secreto para aprovechar mejor nuestro tiempo, es decir, para que sea de mayor calidad.
Como puedes ver, nuestra fórmula nos explica que la calidad de nuestro trabajo o estudio depende del tiempo invertido por la intensidad de nuestra concentración. Es decir, que aunque el tiempo disponible es poco. Si somos capaces de mejorar nuestra capacidad de concentrarnos y de poner el foco en lo que estamos haciendo, sin distracciones, entonces nuestros resultados mejorarán.
Además, a menudo pasa que, cuando tenemos demasiado tiempo a disposición para hacer algo, nos relajamos excesivamente y es allí cuando aparecen las distracciones. Recuerda que nuestra mente emplea unos 20 minutos en volver a concentrarse después que interrumpimos lo que estábamos haciendo.
Así que más valen 45 minutos de trabajo sin interrupciones que 6 horas con pausas y distracciones constantes.
Entrenar la concentración
Ya ves que papel tan importante tiene la concentración. Así que es súper importante entrenarla.
Hace una semana estuve en el quinto congreso internacional de inteligencia emocional y bienestar, y una frase en la charla de la psicóloga Patricia Ramirez me llamó mucho la atención.
Estaba hablando justamente de atención y de su relación con nuestro bienestar, diciendo de que de nada nos sirve practicar mindfulness o meditación 15 minutos todos los días, si el resto de la jornada estamos completamente enganchad@s al móvil y a las distracciones.
Sería como ir al gimnasio 1 vez al día y el resto del tiempo estar comiendo comida basura: de nada serviría a nuestra salud.
Te cuento esto, porque lo primero que podemos hacer para mejorar nuestra capacidad de atención es justamente tomar consciencia de cómo actuamos a lo largo de nuestra jornada. Pregúntate:
- ¿Estoy constantemente controlando el móvil?
- ¿Me dejamos distraer fácilmente?
- ¿Interrumpo demasiadas veces las tareas que intento llevar a cabo pasando de una a otra?
Muy bien, una vez que tengas tu respuesta ha llegado el momento de pasar a la acción. El ejercicio que voy a proponerte es muy sencillo pero a la vez muy difícil de llevar a cabo. Consiste en abrazar y acoger los momentos de vacío y de espera sin hacer nada más.
Me explico mejor. Imagínate que estás en la cafetería esperando a tu amiga para desayunar. Parece que está tardando más de lo normal…¿Entonces qué haces? Lo que hace todo el mundo (fíjate si no lo has hecho) es sacar el móvil y empezar a controlar las redes sociales. Cómo si resultara casi incómodo estar allí esperando sin más. Pues el ejercicio consiste propio en aprender a no hacer nada. Quédate con la mirada hacia lo que te rodea, deja el móvil en el bolso, observa y obsérvate.
Te puedo asegurar que no es tan fácil como parece pero es un ejercicio muy poderoso ya que estarás desentrenando tu cerebro a distraerse y a estar en la búsqueda constante de estímulos y de cosas que hacer.